ARGENTINA INCOMPRENSIBLE
Pocos países en el mundo se asemejan a la Argentina, la inseguridad jurídica, la descontrolada inflación y el oportunismo populista deja en una balanza totalmente desequilibrada a gran parte de los argentinos entre ellos al sector el Inmobiliario que deberá batallar con dos leyes sancionadas el 2020, el 2023 y el DNU de diciembre del pasado año, que enfrentan tanto a Locadores, Locatarios y entre ellos a Empresarios Inmobiliarios, Cámaras de Propietarios de Propiedad Horizontal y representantes de Inquilinos.
Aun con la vigencia del DNU, quienes firmaron contratos de locación hasta Agosto del 2023 con la ley 27551 deberán continuar los mismos por los próximos 3 años aplicando anualmente el índice establecido para los reajustes de esos contratos que para Enero/2024 es del 137.50% y los que firmaron con la ley 27737 también por el plazo mínimo de 3 años vigente desde octubre/2023 deberán esperar hasta febrero/2024 para actualizarlos ( ya que serían cada 6 meses) a través de un índice llamado Casa Propia establecido por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat.
Durante los últimos 4 años más de 30.000 Corredores Inmobiliarios representados a través de diversas Instituciones trasladaron a los Legisladores (Diputados y Senadores) el inconveniente de acarrearía sancionar leyes con esas características violentando inclusive el derecho de acordar libremente entre las partes, plazos, precios y condiciones, pero con la tentación de poder conseguir más votantes a su favor lograron destruir un mercado que se manejó siempre entre oferta y demanda, perjudicando y a quienes a su criterio beneficiaria (Locatarios) tanto por los índices a aplicar como por el retiro de propiedades en locación ante la incertidumbre por parte de los propietarios de “que se les ocurrirá sancionar mañana”.
Hoy estamos con una nueva incertidumbre pues el DNU vigente a partir del 29/12/2023 deja librado a las partes contratantes convenir precio, plazos, reajustes y moneda, pero también deja vacíos normativos que deberán ser resueltos entre ellos como plazos de desocupación anticipada o tipo de actualización a aplicar en los valores locativos, pues no podemos desconocer que la altísima inflación reinante calculada en no menos del 25% para diciembre y responsable de gran parte del problema, diluye en horas sueldos e ingresos de todo tipo, llegando inclusive a no poder cumplir con compromisos asumidos horas atrás.
Ansiamos que en un lapso prudencial (si es posible), podamos volver a creer en una Argentina como la potencia de principios de Siglo que nunca debimos dejar de ser, los ciudadanos merecemos vivir mejor en todos los aspectos, pero para ello sin dudas estamos obligados a saber elegir a nuestros representantes.
Carlos María Borges – Corredor Inmobiliario MP 054